Con la edición de Metal Circus, uno de las mejores de una lista de grandes discos, Hüsker Dü hicieron una fuerte afirmación de que estaban cansados de ser identificados con el punk rock, ya que la mayoría de los punks y de los ideales punk eran ridículos, y de ahora en adelante querían ser conocidas como una banda de R&R. El único problema de esta postura un tanto petulante era que no atraían a muchos aficionados a la música que no fuesen punks. Su música era demasiado rápida y cruda. Mucha de la rabia y pasión de su música venia de sus demonios personales, pero eso funcionaba bien para los punks. Ya que Mould y Hart hicieron la mayoría de las composiciones, se presentaron como los oscuros y el bajista Greg Norton parecía un tipo despreocupado y optimista cuyo extravagante bigote de manillar era la cosa más extraña en él.
La canción que abre Metal Circus, la abrasadora y rabiosa Real World, encapsulaba sus problemas con ideales ‘Punk 101’
La gente habla sobre anarquía y empieza una pelea
Tengo miedo de cosas así, cierro mi puerta de noche
No violo ni expolio la vida de los demás
No practico lo que predicas y no quiero ver a través de tus ojos
No eres un poli ni un político, eres también una persona
Puedes cantar la canción que quieras
Pero todavía eres el mismo…
Por desgracia, los punks que leian las letras estudiosamente y se preocupaban apasionadamente de ellas eran también muchos de los mismos que querían vivir con ceguera en un mundo punk perfectamente harmonioso, por lo que estaban totalmente perdidos en todo ya que la banda estaba gritando de ira contra ellos. Lo que ellos estaban gritando contra ellos era lo importante, y aun tocaban música furiosa para respaldarlo. Aunque hubo escenas y comunidades floreciendo por todo los USA, el hecho de que muchos chavales procedieran de entornos de clase media sin problemas reales hizo que el punk no fuera más que una válvula de escape para un exceso de testosterona la mayor parte del tiempo. Siempre y cuando tocaras alto y rápido, nada más importaba. Esto funcionaba bien para muchas escenas, porque mucha gente iba a ver bandas cuya presencia en sellos grandes y radios era inalcanzable y esas audiencias aseguraban que los shows pudiesen continuar. Sin embargo, cuando pasaba de cierto punto, las cosas se volvían locas. El mejor ejemplo de esto era la cantidad de conciertos de Dead Kennedys que acababan en disturbios. Había demasiados idiotas que iban a los conciertos grandes.
Justo después de que Hüsker Dü terminase de grabar Metal Circus, Bob Mould dijo cínicamente al fanzine Thrillseeker:
‘Si, pasamos todos los test punk. Fuimos entrevistados por Maximum R&R. Nos han preguntado cosas como, ‘¿Estáis metidos en la anarquía? ¿Cuál es vuestra política? ¿A quien votas? ¿Te has inscrito en el servicio militar? ¿Tienes un trabajo? Oh, 4 de 5 correctas - lo pasas - pasas el test – eres un punk. Sabes, cosas así… ya que todas las preguntas eran iguales para todas las bandas, preguntas reales sobre valores. Si les contestas bien eres guay, a todo el mundo les gustas. Si dices, ‘no, no creo que la guerra sea una mala idea del todo’, entonces joder, estás jodido. Es una línea de partido. Lo que pasa es que no me interesa la anarquía en absoluto, creo que es una idea absurda.
Curiosamente, Hüsker Dü no fueron condenados por tomar una postura sin complejos contra la riada del hardcore genérico y las políticas de extrema izquierda que bañaba la escena punk en los últimos dos años. Quizás fue porque ellos nunca habían sido vistos como abanderados en primer lugar, o quizás porque su música era tan buena que nadie podía admitir que la banda estaba ridiculizando el conformismo punk. Mould le conto al magazine de Minneapolis indie Your Flesh promovido por Peter Davies que originalmente era socio de Mould:
‘Lo que es descorazonador en el hardcore para mí es el conjunto creciente de normas. Y había una presión real para ser como las otras bandas, había una presión real para decir cosas buenas sobre las otras bandas. Había una presión real hacía el conformismo en general. Todo el mundo era conformistas inconformistas. Todo el mundo no. Solo decíamos, joder, solo somos 3 personas’
Fui bastante afortunado de ver a Hüsker Dü primeros del 84, y mientras yo me esperaba canciones de Metal Circus. Grant Hart salió deambulando hacía su batería con todo el aspecto del tipo de personaje que cantaría Diane con gusto, una canción vista a través de los ojos de un asesino de Minnesota – ‘podíamos navegar por la calle Roberts toda la noche, pero creo que a cambio solo te violare y te asesinare’. Irónicamente, fue está canción más que otra cosa lo que consiguió la atención de la gente de este álbum y provocó que la banda explicara un millón de veces con disgusto que la canción no se basaba en sus creencias y sentimientos personales, mientras que las canciones anti-hardcore del disco estaban siendo ignoradas.
La canción iba sobre una chica llamada Diane Edwards a la que Grant Hart conoció, que había trabajado en el restaurante Perkins y estaba haciendo autostop. Joseph Tourrie la recogió y la llevó al campamento Girl Scout bajo Elk River y la violó y la apuñalo repetidamente.
‘Estaba esa chica, y lo que le hizo a ella es lo que sucede en la canción’, explicó Grant Hart a un fanzine de New Jersey llamado Hard Times que estaba entrevistando a la banda en un show en el City Gardens en el que yo estaba. ‘Es sobre eso. Espero que la gente se de cuenta que DEFINITIVAMENTE no es una canción pro-violación. Es una forma de expresión – puedo simpatizar con la necesidad de amor y puedo ir un paso más allá y ver a través de los ojos de Joseph Tourrie, que es el tipo que hizo todo eso. Es sólo una especie de – odio generar ninguna simpatía sobre él o lo que sea a través de la canción – solo lo estoy viendo a través de sus ojos’
Hart llevaba el pelo largo negro, iba sin afeitar, tamborileaba con los pies descalzos y era el estereotipo de pederasta/asesino. La versión estándar de Hüsker Dü de los historiadores revisionistas es que Bob Mould era el problemático que escribió las canciones rabiosas y que Grant Hart era el despreocupado que escribió las canciones felices. Esta teoría no funciona porque ya que no había canciones felices antes del disco New Day Rising. Las ideas de Hart de canciones de amor antes eran baladas como Diane y Wheels (‘en una cita con Sharon Tate/voy a recogerla en mi nueva jaula/bien, vamos al cine, vamos al teatro/la patrulla de carreteras nos metió en bolsas’) Mould burlonamente se refería a la tendencia de Hart en esa dirección como los de la canción Leader of the Laundromat de Hart, una referencia oscura a la canción Detergents’ 1964 que ridiculizaba todo el género de las canciones de adolescentes catastróficas como Leader of the Pack.
Mould tendía a ser el más intimo de los 2 y exorcizaba sus demonios a través de la furiosa pasión con la que tocaba y cantaba, mientras que Hart era más un libro abierto. Yo estaba confundido cuando supe de la homosexualidad de Bob Mould años después de la separación de Hüsker Dü, ya que las historias que había oído en la época eran sobre Grant Hart y nunca había escuchado nada sobre sobre Mould. Por supuesto, Greg Norton y su bigote manillar era el miembro de la banda con aspecto más estereotipo gay y resulto ser el único que era heterosexual. La banda era buena volando en pedazos los estereotipos. Jason Willis de Knockout Pills recuerda intentar entrevistar a Hüsker Dü después de un concierto en Kansas City en 1984:
‘Cuando les pedí una entrevista para mi zine, ellos acababan de salir de hacer una entrevista con Mike Blur de Blur el día anterior en Lawrence, así que en su lugar ellos me entrevistaron a mí – ‘¿Cuánto tiempo lleva tu fanzine funcionando? ¿Cuáles son sus influencias?’ fue bastante divertido. Mientras tanto Hart intentaba ligar con un amigo mío – masculino, por supuesto – y cuando mi amigo expreso su sorpresa porque a él le gustaban los chicos, su frase fue ‘voy por ambos carriles de la autopista’. Siempre me gustó eso’
Bob Mould parecía como un tipo medio del Medioeste con barriga hasta que se ataba su maltrecha Ibanez Flying V con cinta adhesiva y empezaba a tocar sobre sus rodillas con una increíble velocidad , su sudorosa cara roja y su voz ronca gritando frases sarcásticas como ‘porque molestarse en perder tiempo, leyendo sobre cosas, todo el mundo es una autoridad, en una tierra libre’ Y anclándolos estaba el sonriente y bailarín de pogo Greg Norton, que de alguna manera te tranquilizaba con respecto a la banda por problemática que pareciera. Incluso en esos primeros días ruidosos de la banda, ellos confirmaban sus cualidades pop a las que iban a inclinarse cada vez más en el futuro.
La banda tocó Diane y It’s Not Funny Anymore de Metal Circus, pero esas eran las únicas canciones lentas del disco y yo estaba esperando otras. Por otro lado, apenas tocaron algo que reconociera, sin parar entre canciones, de modo que un acorde colgado daba paso a la siguiente canción. Había largos periodos de feedback salvaje tocado por Mould, en los que se quedaba fijo ante su ampli durante unos 10 minutos, retorciendo cada sonido que salía de su guitarra. Creo que la mayoría de material que tocaron era de Zen Arcade, con un par de viejas canciones de Land Speed Record y Everythihg Falls Apart. Aunque el concierto fue indudablemente uno de los más intensos que he experimentado, no pude evitar desear que tocasen más canciones que conociese. Pero eso fue algo que tuve que aprender sobre la banda. No eran complacientes con el público.
‘¿Era un público o una naturaleza muerta?’, preguntó Hart a los entrevistadores de Hard Times más tarde esa noche, que se disculpaban por la falta de movimiento en City Gardens. Greg prefería la tranquilidad en comparación a la gente arrojándose desde el escenario, aunque Grant pensaba que si la gente estaba bailando al menos demostraba que habían escuchado a la banda antes. Igual que yo, fue la primera oportunidad de un montón de fans para ver a Hüsker Dü, y la mayoría de nosotros estaba familiarizado con su música editada, pero ninguno tenía pistas sobre las canciones que estaban tocando. Fue una conmoción más que otra cosa el ser expuesto a la atmósfera de Zen Arcade en directo e intentar y hacernos a la idea.
La banda había estado teniendo ese efecto con su estilo de tocar sin parar desde Land Speed Record, y Jello Biafra lo describió bien en 1982 cuando se sentó en una entrevista con la banda para Maximum R&R:
‘Creo que es como estar sentado en la sala de espera del dentista’, dijo, ‘y no saber qué es lo siguiente que va a suceder. Hay mucha gente que baila al principio, y entonces se da cuenta que eso no suena conocido y entonces se para. La gente no se va a la parte trasera a hablar con sus amigos, simplemente se quedan congelados’
Las siguientes dos veces que los vi en un par de shows consecutivos en Trenton y el sur de Jersey, el segundo fue un repertorio idéntico al de la noche anterior, lo cual no parece casar con el tipo de banda que eran. Por la originalidad de su música y su rechazo a tocar siempre canciones editadas, ellos eran muy formales en algunas cosas. Cuanto más tiempo pasaba, más se apegaban a los mismos repertorios en una gira. La mayoría de las entrevistas a partir de 1984 se centraron en desvincularse de su pasado y de lo que no eran. Ya había poco de lo que eran. Lo que hacía tan fascinante Zen Arcade era la furiosa pasión de todas sus canciones. Eso había estado embotellado durante años, esa gran acumulación de melodías furiosas, y una vez que lo tenían plasmado en vinilo, avanzaron con la música generalmente intacta, pero sin la desesperación y la urgencia que ellos tenían antes. La pérdida de eso era por lo general la sentencia de muerte para la mayoría de las bandas, pero los Hüsker tenían mucho talento compositivo y evocaban rabia y emoción tan fácilmente en sus canciones que tenían grandes discos delante de ellos. Siguieron escribiendo canciones intensas en su debut para un sello grande, Candle Apple Grey, pero nunca volvió a tener el filo de hitos como Metal Circus y Zen Arcade. Sin embargo, ya en Zen Arcade, la banda se enfrentaba a el ‘pensamiento estrecho’ de bandas que no intentaban abrazar el mainstream.
‘Tienes que estar preparado si piensas en el fondo de tu mente que quizás te vas a poner al día como el movimiento de los 60 hizo’ Decía Mould en el fanzine canadiense Pages of Rages, sobre el objeto de como ellos manejaban el volverse más populares. ‘Tienes que pensar sobre esas cosas si realmente vas en serio. Para nosotros, estamos tocando nuestra música. Me deshice de las etiquetas cuando empecé a tocar. Todas las etiquetas y categorías salen por la ventana en cuanto empiezas a tocar música. Si puedes superar eso… ya que hay bandas que dicen, ‘si, somos hardcore. Tenemos una X. Somos Straight Edge’ Te estas aislando completamente de una posible audiencia más amplia. Si tienes algo importante que decir, ¿Por qué no decirlo a más gente? Si nos hacemos populares, seguiremos haciendo lo mismo; no hay nada de malo con tener más gente escuchándote. Si es que no lo tienes, quizás tengas miedo de no tener nada que decir. Como decir, ‘Solo quiero esto. No quiero ser más popular porque sé que estoy lleno de mierda y solo los que tienen 12 años escuchan lo que estoy diciendo’ No puedes cambiar tu marco de acción. Estamos hablando a todo el mundo: no estamos hablando a los Straight Edge; no estamos hablando a los hardcore; estamos hablando a todo el mundo’
Mould admitía libremente que no eran la banda que habían sido hace unos pocos años. Hacer llegar tus ideas a una audiencia mayor era la explicación de siempre de las bandas que se volvían más pop y firmaban con sellos grandes, y era un signo de que Hüsker Dü no estaban ya convencidos de que fuese tan imposible tratar con el mundo corporativo musical. Solo un par de años antes Mould había dicho a su periódico escolar, Mac Weekly, lo siguiente:
‘A veces nos critican demasiado por pensar demasiado. No es como ideamos esas canciones de la nada. Nos sentamos y hablamos de política, además de negocios, placer o música. Tenemos algo que decir, y eso nos hace enfadar. Una vez que tienes el nivel de bandas como Chameleon, al público no le importa lo que las canciones dicen. Todo lo que quieren es ponerse sus galas, emborracharse, bailar y divertirse. Si fuésemos accesibles y todavía tuviésemos el mensaje, a ellos no les importa’
‘Después de su primer álbum, los Clash no tenían nada que decir. Su política es muy oportuna ahora, y ellos son muy contradictorios. Dicen, ‘odiamos el sistema, odiamos al gobierno, blah, blah, blah’ y mira donde están – en la puta CBS, una gran estructura corporativa. Las cosas se pueden cambiar solo con hacer despertar a unas pocas personas. Una forma de hacerlo es patearlas en su cara, como intentamos hacer con nuestra música. Si se sienten suficientemente amenazados, responderán. La única forma de que las políticas modernas sigan avanzando es por grupos amenazando el orden establecido’
Sin embargo, la banda mantenía una desconfianza sana de los sellos grandes según les estaban cortejando. Estaban bastante al tanto de que bandas como The Knack y Go Go’s habían aparecido y se habían esfumado en un santiamén, y eso debería cuidarte de cualquiera que te dijera que tú podías ser la próxima gran sensación. Como Vic Bondi de Articles of Faith dijo, bandas como Hüsker Dü y Black Flag no se oponen a ser más populares y pasar al siguiente nivel, sino que quieren reescribir las reglas si van a hacer eso. Mould se angustió mucho por ello en 1985 cuando la banda estaba a punto de poder elegir si querían pasarse a un sello grande. Lo contó en Your Flesh:
‘Es como si la banda está en un punto que puede, no consciente, sino inconscientemente, aparentar dar la espalda a todo lo que fuimos una vez. Estamos en el borde de poder firmar con una agente. Podemos hacer todo lo de los grandes shows rock. Ya sabes, es mucho examen de conciencia. No cambiara nuestra música. Pero ¿Qué podrían hacernos? La cosa es que somos una real unidad autónoma. Tenemos la idea de como se debería presentar, y cuando se debería hacer. La frecuencia de las giras, donde y que haríamos’
Aunque no entendía su reticencia a tocar canciones de su grabación más reciente, ahora si lo entiendo. Le mencione algo a Greg Norton en un show del City Gardens sobre su habito de tocar material en su mayoría de los discos que iban a grabar, y se reía y dijo, ‘demonios, alguno de ese material era para dentro de dos discos’ Este siempre ha sido el caso. Escribían demasiadas canciones, y para cuando saliese cualquier edición, ellos habían estado tocando ese material durante años y no querían tocarlo más. No es que se avergonzasen de él, sino que para ellos parecía viejo.
No les importaba una mierda lo que habían editado o lo que sus fans querían escuchar. Eran tan prolíficos compositores que, hasta los estados finales de su carrera, siempre tocaron repertorios casi enteros de material aun no editado. Podían ser gente difícil. Si intentabas hablar con Bob o Grant, ellos mascullaban algo, indicaban que Greg hablaba por ellos y se alejaban. El afable Greg, el Greg feliz, siempre entre el público antes y después del show, tan amable y amigable como podía ser, pero dejándote pensando aún más que esos otros dos deben tener algunas historias que contar, algunas cosas seriamente retorcidas que expresar si tan sólo no se escondieran detrás del Frente Norton.
Supongo que tengo esa impresión de ellos porque nunca les pedí una entrevista, la cual casi siempre la hacían por Mould y/o Hart, y eran buenos en acomodar cada entrevista a la que eran requeridos. Llevaban una vida muy ajetreada en la carretera y no tenían tiempo para charlar. Era en las cosas más superficiales que parecían dejar a Norton. Aunque Greg escribía más canciones al principio en la banda, para la época en que editaron New Day Rising él no escribió ninguna canción y parecía estar contento con participar en el operativo. En realidad, los otros miembros indicaban que, si alguien era un tío misterioso en la banda, ese era Norton.
‘No estoy realmente seguro de lo que pasaba en ese viaje’, le contó Mould a Flesh. ‘Greg es misterioso en cierto sentido. Es lo que la gente me ha contado. No creo que sea muy misterioso. Creo que la existencia de Greg es diferente, ha elegido una vía diferente. Lo que quiero decir es que tiene un montón de amigos, trabaja, vive en una casa, no baja al centro mucho, tiene la misma novia desde hace 5 o 6 años. Tiene otros amigos y queda para jugar a las cartas. Va a clubs nocturnos respetables, va a clubs de jazz y sale con gente diferente’
Si se le deja a su aire o en compañía de Greg, Grant Hart era más gustoso de dejarse llevar en las entrevistas. Al principio en un show en City Grdens yo vi como Hart les contaba a los entrevistadores de Hard Times:
‘Cuando me metía LSD en el instituto, me quedaba tumbado en la cama de viaje, intentando conciliar el sueño y lo que más tiempo me consumía era masturbarme. Ahora, una vez que estaba muy colocado y pensaba, ‘voy a masturbarme para poder dormir, voy a pensar en todo sin estimulación manual ni nada parecido, voy a fantasear completamente con el sexo y correrme sin tocarme a mí mismo’ Esto sí que era ácido del bueno, ¿verdad? Lo intenté y lo hice. ¿Sabes que después de correrte hay un pequeño instante que sientes frio a causa de las endorfinas que se han liberado en tu cuerpo? De repente estoy temblando y pensando, ‘dios mío, si puedo hacer que me corra yo solo, puedo congelarme hasta morir’ Así me abrigue del todo. No iba a perder el tiempo con eso’.
Aunque la banda incluso ofrecía una idea general sobre la línea argumental de Zen Arcade como álbum conceptual, en la única entrevista que lo leí ellos lo explicaban del todo. La entrevista de 1985 en Your Flesh que Peter Davies hizo con Mould fue una de las mejores que hicieron a la banda, reflejando el hecho de que Davies era alguien que Mould había conocido hace tiempo en la escena de Minneapolis en los días de 1979 tocando en el Longhorn.
‘Bueno, solo es la historia de ese chaval’, explicaba Mould, ‘dice que él creció con todo respeto, en Rochester, ese pequeño pueblo. Su padre es un doctor, y su madre era ama de casa. Su padre era cirujano, muy nerviosos, tenía un trabajo con mucha tensión. Y es una mala situación hogareña habitual. Y el chaval un día decide que va a empacar y mudarse a la Gran Ciudad. Y aquí es donde muchas situaciones como el rollo Hare Krishna ocurren, tropezando con gente de la secta, como la cuestión de fondo de Dreams Reoccurring, Indecission Time. Sabes lo que pasa cuando corres y te alistas en el movimiento, tienes que hacer algo, él se involucra en diferentes cosas, y finalmente, lo que la historia cuenta es que se metió en una banda, y se volvió demasiado poseído por la banda, y enloqueció a todo el mundo, y todos renunciaron a él. Había llegado a un punto, donde él era una persona que a la que la gente la veía como algo parecido a Henry Rollins, en el sentido de ser un ícono. Y tiene verdadera intensidad detrás de él y voló la cabeza de todo el mundo, lo sabes y flipaste. Pinks turns of Blue era una de esas cosas que apareció después del concepto, ya que el tipo tenía todas esas novias. El nombre de una de ellas era Pinky. Él alineo a todo el mundo a su alrededor, su novia murió, deseaba tener algo más, y acabo metiéndose en las drogas. La cosa reflexiva. Esta es la parte que no salió en el disco: terminó en desintoxicación y empezó rehabilitación. Había presagios en nuestras mentes donde el chaval se metía en computadoras y video juegos. Era realmente brillante, cuando se metió en un programa de internamiento donde se encontró con ese tipo que tenía una empresa informática y acabó trabajando para ellos, diseñando juegos y esas cosas. Y un día se quedó dormido en el trabajo, y alguien estaba diciendo, ‘despierta, despierta, despierta, despierta’ Y ahi es donde el giro de la historia se ve porque todo era un sueño. Se fue a la cama una noche, y todo el rollo era un sueño, y el final de la cara 3 es donde él se despierta, y era su padre despertándole para ir a la escuela. El día siguiente’.
A mediados de los 80 el mundo punk estaba en estado de agitación, según se separaban las bandas, cambiaban la dirección, intentando sacar provecho, y normalmente luchando por averiguar que querían hacer en el futuro. Minor Threat ya lo habían dejado tras una carrera espectacular pero ilustre que hizo de Ian Mackaye uno de los íconos punk más grandes. La idolatría no le sentó bien, ni la dirección que había visto tomar a su banda.
‘Era hora de parar. No nos caíamos lo suficientemente bien’, le contaba Mackaye al zine de Santa Cruz Monkey Magnet en 1995, recordando los hechos que llevaron a la separación. ‘Cuando empezamos, yo tenía 18, Jeff 18, Lyle 16 y Brian 14 años más o menos. Desde 1980-83, durante esos primeros pocos años, todo el mundo quería estar en una banda tan mala, no nos importaba una mierda. Y nos peleábamos todo el puto rato. No estábamos de acuerdo en un montón de cosas diferentes, pero la mayoría de esas cosas eran discutibles, aunque no eran accesibles para nosotros. No fue hasta que empezamos a tener éxito que cosas como tener managers o la posibilidad de ser requeridos por los clubs o fichar por sellos, esa es la primera vez que algo de eso había surgido. Una vez que esas cosas son posibles, una vez que las ambiciones de la gente entran en juego, las diferencias en nuestras ambiciones se pusieron de relieve. Así que bastante pronto, para 1983… yo era muy testarudo, un tipo underground y esos tipos, a los que sus padres les estaban diciendo que deberíamos tener un manager y tener un contrato y todo ese tipo de cosas, y yo estaba en plan, ¡una mierda! No estaba interesado en hacer eso, de ninguna de las maneras. Mi opinión era, ‘¿Porque cambiar ahora? Es ridículo’ Estaba bastante claro que, si la banda iba a continuar, teníamos que cambiar los fundamentos de como teníamos que trabajar en ese momento y esto haría a la banda sufrir. Yo personalmente creía que lo poderoso de Minor Threat es que podía parar al instante, cuando la banda seguía siendo vital. No seguir manteniendo el nombre de la banda y solo destruirlo’
En cuanto los músicos empezaron a volver a caer en los estándares del R&R o del pop, o descubrir el poder de los riffs metaleros, perdieron todo lo que les había hecho originales. Fue la carencia de influencias del estándar rock, la falta de deseo de querer sonar como cualquier otro, su deseo de definirse a ellos por lo que no eran lo que les hacía creativos e interesantes. Muy pocos eran músicos o compositores suficientemente buenos para salvar la tierra de nadie entre la rudeza del sonido hardcore y las capas de un sonido más complejo. Hüsker Dü fueron una de las pocas bandas que lo sacó.
De las que no lo hicieron, Bad Religión siguieron a su álbum de debut How Could Hell Be Any Worse? con un extraño y desastroso cambio al synth pop llamado Into The Unknown, con una portada del espacio exterior. El álbum falló miserablemente al público punk, y no ganó ningún converso del mundo ajeno al punk. Cuando Al Flipside preguntó a Jello Biafra en una entrevista de 1984 sobre como Dead Kennedys iban a manejar el convertirse en demasiado populares para tocar en garitos pequeños, Biafra se quebró:
‘Oh, hay maneras de evitarlo. ¡Solo mira el segundo disco de Bad Religion!
Después de pasar algún tiempo estudiando en Wisconsin, el cantante Greg Graffin regresó a California para estudiar en UCLA y fichó a Gret Hetson de Circle Jerks para reemplazar al guitarrista y fundador de Epitaph Records Brett Gurewicz. Los nuevos Bad Religion pronto editaron un EP pegadizo llamado Back to the Known. Antes de cambiar la dirección hacía formulas convencionales de nuevo, el cantante Greg Graffin defendía la música de Into the Unknown y cuestionaba el límite de sus habilidades del público punk para adaptarse.
‘Si estás rabioso y escuchas el primer disco de Bad Religion, entonces va a gustarte’ le decía a Flipside en 1984, ‘Si escuchas el nuevo de Bad Religion de mal humor no te gustara tanto… La gente cambia, Jesús, escribí esas primeras canciones cuando tenía 15 años, ahora tengo 19 – todavía soy un chaval, pero he cambiado mucho y no pienso que mi vida se vaya a estancar nunca. Si, es muy buen disco. Pero no puedo entender a algunas personas, tengo muchos discos punk de todo tipo, y creo que este disco le gustara a la gente porque tiene buenas letras, la música también era buena, pero eso no era lo que importaba. Miro atrás y pienso, ‘Dios, debo haber estado de humor raro cuando escribí esto’ La música está bien, pero eso no es lo especial, y las letras no han cambiado tanto si lees las de un disco más reciente’
Preguntado por la desaparición de su característica cazadora de cuero de su armario, Graffin se puso práctico:
‘Está en casa, en una especie de escondite. Cuando era más joven pensaba que había más de lo que conocía y mucho menos bajo mi control. Aunque todavía esta allí, un día lo descubriré… cuando esté muy cabreado. Pero realmente no tengo mucho por lo que estar cabreado. Claro que es un mundo de mierda, pero estar enfadado toda tu vida no va a cambiar eso. No soy apático, pero cuando soy alguien que no piensa que tomar parte en una protesta antinuclear no les hará cerrar la planta. Solo soy un tipo pateado en el trasero… sin chupa de cuero. Lo que quiero decir es que Keith Morris puede salir con una camiseta de Budweisser y nadie le cuestionara, pero cuando un tipo como yo se quita la chupa de cuero, la gente se impresiona. Es realmente difícil manejar eso…’
A lo largo del tiempo – una serie de discos punk pegadizos, inteligentes y melódicos que definieron el sonido ‘Epitaph’ – Graffin volvió a tomar la dirección de la marca y repudió por completo el segundo álbum. Para gente que empezó tan joven como Graffin en la escena, no era poco común parecer un adolescente y mirar atrás unos pocos años como una persona diferente. Lo que era poco común era cambiar del todo y volver de nuevo a la primera imagen y música. Una vez que el ardor de la juventud se ha sustituido por unos ojos hastiados, es bastante difícil volver atrás.
La bomba que fue el punk rock se ha arrojado en todas las escenas más grandes, y la cuestión ahora es donde caerá la próxima. ¿En el cráter? ¿Va a arrojar otra bomba en cualquier lugar? ¿O firmar con ‘el hombre’? La atracción del éxito comercial incrementaba la confusión, y una de las principales razones de eso fue la introducción y el éxito de la MTV. Aunque la mayoría de la programación de MTV fue el atroz Glam Metal de la época, bandas como U2 hicieron que un montón de bandas sintieran que quizás había un compromiso que pudieran tener para conseguir el éxito. Kraut dieron un gran paso adelante cuando la canción All Twisted entro en MTV en diciembre del 83 (aunque en realidad parecía emitirse alrededor de las 3 A.M. y no sé cuántas veces perdí el tiempo viendo música terrible en casa de amigos con la esperanza perdida de conseguir verlo) Ninguna banda en un sello independiente había aparecido en MTV, mucho menos grupos punk o hardcore. A primeros de 1983 Kraut había editado An Adjustment to to Society en su propio sello, Cabbage Records, y el disco fue fabricado y distribuido por Faulty Products/IRS.
Después de que Faulty se fue a pique, Kraut volvió a prensar el disco por sus propios medios. La dedicación valió la pena, metían All Twisted en MTV mientras operaban como un grupo DIY. Aunque algunos en la escena de New York pensaban que a Kraut le quedaba grande, la banda mantenía su dedicación el espíritu DIY incluso mientras eran distribuidos por Faulty. La canción Sell Out – con la estrofa que la abría ‘¿Cuál es el uso del pensamiento cuando alguien lo hace por ti?’ – se dirigía a ‘todas las compañías y personas que creían en las compañías discográficas grandes’ según el bajista Don Cowan.
‘Toda la idea de Sell Out’, explica Cowan a Al Quint de Suburban Punk ‘es que, teniendo nuestro propio sello, estamos tomando un pedazo de ese edificio en la 5ª Avenida. Si nuestro disco vendía 10000, entonces 10000 menos que vende RCA, que les jodan’
El video fue un clásico timo punk, el cual fue descrito por Doug Holland en una entrevista en Flipside cuando Kraut estaba tocando en California.
‘De vuelta a New York City, con lo gran ciudad que es, hay gente a la que le gusta hacer videos. Así que convencí a uno de ellos para hacer videos rock – y le dije hazlo por nosotros. Así que por 300 pavos hicimos uno de 25000 o lo que sea que cuesten. Habíamos tenido mucha respuesta de gente en sitios en los que nunca habíamos estado como Nashville y Florida y el puto interior de América donde la gente no llega a ver nada. Ese video es la puta personificación de los videos punk. No debimos hacerlo, sabes, a nivel comercial, pero lo que hará será abrirnos puertas, trataremos de abrir puertas…’
Alentados por la idea de que el hardcore punk estaba a punto de ser aceptado por el mundo empresarial, muchas bandas sufrieron conflictos entre dos bandos diferentes. Por un lado, estaban los miembros de la banda que valoraban el espíritu DIY y veían a los músicos como algo secundario a la pasión y el compromiso. Y por otro estaban los músicos que habían sido atraídos a tocar en bandas punk porque los estándares no eran muy altos, pero que no tenían compromiso con los valores de independencia y la comunidad punk. Mientras que las bandas o se separaban por estos conflictos, o les quitó las esperanzas musicales de acelerar su ascenso al éxito, la aparición de Kraut en la MTV demostró ser una anomalía. Suicidal Tendencies fue una de las pocas excepciones a la regla no-indie, ya que su video de Institutionalized tuvo mucha rotación en MTV. En lugar de tener aspiraciones de ser emitidos en MTV, Bob Mould se apartó.
‘Creo que lo que está pasando con eso es bastante raro’, le contaba al magazine Your Flesh en 1985, ‘creo que hay mucho más en esto de lo que la gente entiende. Están mezclando mucho simbolismo, están mezclando a Satán con Cristo, con mucha fuerza, en los dos videos. A lo que realmente se reduce es a un programa de juegos para chicos de 13 años’
Tras un reagrupamiento, cuando la segunda generación del punk underground americano siguió su curso y dio de baja a todos estos que no estaban por la labor , toda una serie de bandas nuevas entraron en la escena. Muchas bandas estaban ralentizando su sonido – siguiendo la idea mitificada que la música no puede progresar sin ser más lenta – pero algunas bandas se dieron cuenta que podías combinar geniales composiciones con velocidad Blitzkrieg. Para los metaleros que se habían sentido atraídos al hardcore porque no había nada suficientemente duro en la escena metal a primeros de los 80, una cantidad de furiosas bandas thrash cambiaron desde el hardcore al ‘speed metal’. Mientras que hubo pequeñas diferencias entre los estilos para los no iniciados, el speed metal violó una de las reglas fundamentales del punk – trajeron de vuelta los solos de guitarra. En cuanto escuchaba uno, huía horrorizado de una banda.